Corazón de Ulises

[ansanga]

Y viajar es bailar, acompasar tu paso al de los otros, girar en el vacío siguiendo los sonidos y los ritmos que no conocías antes, sordo a todo aquello que no sea el son de una canción ignorada. Danzar dándole la espalda al miedo, seguir adelante sin temor, escribir sobre lo que despierta tu pavor y al mismo tiempo aviva tu fe en los hombres, hurgar en lo desconocido con el dedo de la audacia. ¿Acaso hay algo más libre que bailar?  (J. Reverte)

Dicen, que los mejores viajes son los que no han sido planificados, aquellos en los que decides a cada paso tu camino, inherentes al capricho y al destino, una aventura abierta sin fronteras, sin cotas de días definidos ni de horarios establecidos, aquél, que sólo atiende al deseo del espíritu.

No diré que no pensará alguna vez en hacer algo parecido, vagamente en mi mente imaginé un recorrido perfecto, y aunque sabía que quizá ese sueño no fuera más que un vano pensamiento, no renuncié a mantener vivo el deseo, y hoy, habiéndolo ya cumplido, no puedo decir que me haya saciado completo, todo lo contrario, ahora mismo planeando me encuentro el segundo. Sin haberlo previsto me vi en medio de una aventura que no esperaba recorrer y acabó convirtiéndose en un momento inolvidable, cambió el concepto y la manera que tenía de viajar, creo que incluso llegó en parte a definirme, me brindó la oportunidad de cerrar el círculo de una historia que no me había percatado que hacía años que había abierto y en ese momento me di cuenta, de que ya era la hora de que llegara a su fin.

Me sería difícil comentar todo lo sucedido, o las vivencias y las personas que conocí en mi camino, ello se haría demasiado largo, aquí sólo pretendo que hablen las fotografías y la oportunidad que tuve de ver y de aprender, de los sitios que visité.

No era la primera vez que viajaba en solitario, aunque nunca lo había hecho durante tantos días. Un 20 de febrero me exilié involuntariamente de España hacia Inglaterra como muchos otros con la intención de trabajar allí y poder afianzar mi nivel de inglés, sin tener fecha determinada de vuelta pero con la ventaja y la casualidad de llevarme conmigo la moto. Aunque cuando lo pienso, tal vez no fuera casualidad, quizá, como decían los griegos, tan solo fuera un curioso guiño del hado. Me despedí de amigos, me despedí de familiares, y cuando todo estaba listo para irme en avión, de repente una idea, por mar. Volví a revisar la ruta, y sopesé mis opciones, y en mi cara apareció una leve sonrisa, ella viene. Y así todo empezó, con un simple billete de ferry, con una moto, con un piloto.

Hace años leí una frase que sin esfuerzo retuve grabada en mi memoria: "Un día, navegaré por todos los océanos utilizando mi corazón como brújula" Me pareció en su esencia desinhibida una bonita forma de viajar y en ese momento pensé que tal vez, algún día yo pudiera hacerla realidad. Cuando el propósito inicial del viaje se torció, dicha frase volvió rauda a mi memoria, ahora es el momento de hacerla realidad me dije, no hay planes, no hay restricciones, no existen los días ni el tiempo definido, sólo yo. El resultado, 9 países recorridos, 25 ciudades visitadas, 4 parques naturales y un circuito de velocidad.

Éste, fue el recorrido más allá de la frontera:

Portsmouth / Bournemouth / Southampton / Parque natural New Forest / Costa inglesa / Salisbury / Stonehenge / Londres / Calais (muro Atlántico) / Dunkerque / Brujas / Gante / Bruselas / Amberes / Ámsterdam / Berlín / Postdam / Bydgoszcz / Gdansk / Poznan / Praga / Nuremberg / Munich / La selva negra / Friburgo / Estrasburgo / Nurburgring / Metz / Nancy / Dijon / Millau / Perpiñán / Colliure / Valle de Nuria



De modo que empecemos, espero que os guste como a mí ver fotografías, perdonarme si son muchas pero me ha sido imposible reducir aún más el número de ellas, mi propia selección del viaje supera las 1000 unidades y todas ellas tienen para mí algo especial, por lo que me ha sido difícil descartarlas.


Portsmouth
















¿Qué haríais si un gélido día de invierno os despertarais y estuviera nevando? Pues supongo que lo mismo que yo, cogeríais la cámara y empezaríais a caminar.













La costa inglesa



Durdle Door








Old Harry Rocks





Salisbury












Stonehenge






Remando hacia el Egeo

Como las flores adornan la tierra y las estrellas el cielo, así adorna Atenas la Hélade y la Hélade el mundo. (Stifter)

Todo Londres carecía de sentido para mí, poco me importaba esa ciudad hasta no haber visitado aquello que ha centrado mi atención durante tanto tiempo, desde que supe hace años que una de las más importantes colecciones de Grecia se encontraba en el Museo Británico, sabía que dicha parada era una obligada antesala de un viaje que espero con ansia recorrer. Preso de una civilización cuyo conocimiento cinceló al hombre tal como lo conocemos, recorrí los vestigios de una cultura desde cuya base se cimentó la nuestra. En sus mármoles continuaban vivos sus filósofos, sus matemáticos. Poetas, astrónomos, arquitectos, estadistas, las grandes obras de los trágicos impresas en cada ánfora, todo un mundo de luz que sólo supo que aportar conocimiento y belleza a la humanidad. Tan absorto me encontraba que apenas me quedó tiempo para poder centrarme en las demás culturas allí representadas, es curioso cómo nos interesamos por una u otra cosa sin depender de la importancia relativa que ha tenido para la historia, podía estar largo tiempo observando un friso, una columna, o un busto y la Piedra Roseta apenas despertaba mi interés. Como escribió un gran viajero, "la sangre de Grecia rezuma en mis arterias, mientras escribo aquí, en España".



Monumento de las Nereidas


Parte del frontón del Partenón


Una cariátide


Sócrates


Aquiles en Troya


Hombre de Ulises en la cueva de Polifemo


La piedra Roseta



Londres

[ansanga]

Muro Atlántico (Calais)

"-¿Saben por qué falló el muro Atlántico? Por la gente que se enfrentó a él." (testimonio de un combatiente del desembarco)












De las tres ciudades de Flandes que visité, Brujas, Gante y Amberes, tan solo diré una cosa, en especial de las dos primeras. En cuanto podáis, id a verlas.


Brujas




















Gante














Bruselas




Amberes


















Ámsterdam

De la mano de Ana descubrí Ámsterdam, aquella niña de quince años cuya vida y testimonio ha conmovido a millones de personas y cuyo único deseo era poder volver al colegio, me hizo de guía por toda la ciudad. Por falta de previsión no pude visitar "la casa de atrás", pero me alegró enormemente comprobar cuantas personas continúan yendo a Ámsterdam a conocerla. En cuanto a mí, no sentí que necesitara visitar aquel lugar, la había llevado conmigo durante mucho tiempo, y sabía de ella cuanto necesitaba.


Querida Kitty:
Me es absolutamente imposible construir cualquier cosa sobre la base de la muerte, la desgracia y la confusión. Veo cómo el mundo se va convirtiendo poco a poco en un desierto, oigo cada vez más fuerte el trueno que se avecina y que nos matará, comparto el dolor de millones de personas, y sin embargo, cuando me pongo a mirar el cielo, pienso que todo cambiará para bien, que esta crueldad también acabará, que la paz y la tranquilidad volverán a reinar en el orden mundial. Mientras tanto tendré que mantener bien altos mis ideales, tal vez en los tiempos venideros aún se puedan llevar a la práctica...  (Tu Ana M. Frank)










La mañana de camino hacia Berlín apareció soleada, y las pocas nubes en el cielo no hacían presagiar la dificultad y dureza de aquel trayecto. Una temperatura máxima de menos 6 grados bajo cero según las indicaciones de mi móvil, a saber cuál sería la realidad, y un no exagerado pero si fuerte e incesante viento hicieron del trayecto una "agradable" prueba de resistencia. Ya en el primer repostaje apenas saliendo de Ámsterdam mi moto me ratificó lo que mis huesos ya sentían, un frío voraz hizo congelar la cerradura del depósito de gasolina y sólo después de abrir el motor y echar un poco de aceite caliente en ella, la pude abrir y me permitió repostar. Un obligado e incesante movimiento en mis dedos de pies y manos para hacer circular la sangre, y una parada más que necesaria cada 40 minutos en el área de servicio para visitar el secador y quitar un poco de frío a mis dolidas manos fue la rutina de aquél soleado día alemán. Aquella noche la temperatura alcanzó al menos los 12 grados bajo cero, y me pasé parte de la noche preocupado por si la moto lo resistiría, a la mañana siguiente, arrancó sin problemas,  aunque como ya había aprendido me tocó dejar que cogiera temperatura antes de poder moverla, si circulaba con ella antes de eso, el aire helado impedía que el aceite se calentara y llegará a la temperatura óptima.   

Berlín






























Berlín es una ciudad dura, sus reconocidos monumentos y lugares apenas fueron meras sombras para una mente embebida en la historia, me fue imposible centrarme en otra cosa que no fuera el recuerdo de la infamia y la deshonra. Mientras deambulaba por sus calles no cesaban de aparecerse las imágenes y los nombres de la deleznable historia. Que herida tal nos fue infligida que setenta años después, todavía continuamos sangrando.


Monumento al holocausto





Me quedé mirando al niño, preguntándome cuál sería su vida. En mi interior se agitaron los recuerdos. Una madre amante, un padre cariñoso. Hermano, hermana... una familia que lo compartía todo, que reía, se enfadaba, descubría la belleza en la música, la alegría en el deporte, todos nosotros admirando en silencio a nuestro preocupado padre, el médico siempre pendiente de una persona enferma, de un paciente que perdía. Y todos nosotros sintiendo cierto temor ante nuestra madre, tan digna, encantadora e inteligente.
Y todo había sido destruido. Incinerado y las cenizas lanzadas a los cuatro vientos. Y cuántos millones de otras familias fueron destruidas sin el menor gesto de piedad, sin motivo, una explosión monstruosa de asesinato y odio que aún seguía sin comprender.  (Gerald Green – Holocausto)


El muro de Berlín


















El verdadero muro, libre del turista fortuito, desnudo, execrable y cruel, recuerdo de la vergüenza acontecida.




Postdam


















Un mar de nieve me acompañó desde antes de llegar a Berlín hasta que abandoné Polonia.

[ansanga]

Bydgoszcz












Castillo de Malbork






Gdansk

El cubata team llega al Báltico 












Poznan










Aunque oculto por la nieve, donde hay una moto, siempre hay un camino.






Praga (una joya en Bohemia)
























Nuremberg


















Robert Jackson tenía razón cuando inculpó a cada uno de los jerarcas de las principales organizaciones en representación de toda la Alemania nazi. Mientras dejaba que el silencio de la sala me trajera el eco de la historia, me di cuenta observando el banquillo de los acusados, de que no sólo estaba viendo a Goring, a Hess, Ribbentrop, Speer, y a los demás inculpados que estuvieron allí sentados, allí también se encontraba Goebbels, Eichmann, Hoss, Hitler, Himmler, y todos los cientos y miles de personas que hicieron posible tan funesto suceso, y con el recuerdo de Berlín todavía latente en mi mente, comprendí al fin, el valor de no someter a la venganza las brutales heridas de la guerra.
Núremberg terminó con la promesa de que tal horror no pudiera volver a sucederse y de que ninguna guerra librada en adelante no estuviera sometida a la ley. Casi 70 años después, esa promesa, esa esperanza, todavía sigue en pie, aunque en ocasiones no se haya cumplido.




Munich











El jardín inglés










Königsplatz






La última mañana que estuve en Múnich amaneció fría y sombría y enseguida me contagié de ella, un triste y dulce aroma se desprendía de mi última parada en la ciudad, e intentando absorberlo y retenerlo por última vez cuanto pude, me despedí de ella. Con la sensación de haber dejado parte de mí en esa ciudad, puse mi mirada en otro rumbo, era el momento de dejar atrás la historia, cerrar ese viaje, dar un giro a mi mente y abandonar las ciudades, me era necesario volver ya a ese pequeño lugar, en donde moto y piloto respiran.


La selva negra

Sentí un escalofrío por todo el cuerpo con las primeras montañas, las curvas que le preceden y los primeros árboles me hicieron recordar una sensación familiar que hacía tiempo que no tenía, un sentimiento cálido, un susurro disuelto en el aire, de nuevo, una mirada que volvía a relajarse frente a la naturaleza, después de cientos y cientos de kilómetros, estaba en casa.
Llevaba tiempo buscando un bosque como aquél, tan tupido y tan denso que a la misma luz le cuesta conocerlo, desafiante a la fotografía, como todo lo que realmente importa, rebosante de silencio y de paz, y aunque algo pardo por el duro invierno, en ninguna medida eso disminuía su esplendor. Después de recorrer la ruta más típica de la Selva aconsejada por un amable lugareño, busqué sobre el mapa la carretera más pequeña que pude encontrar, quería adentrarme en el bosque tanto como me fuera posible, conocerlo, sacar de él todo lo que tuviera, escuchar y aprender todo lo que tuviera que decirme, y vaya si lo hizo, le bastaron dos sencillas palabras transportadas por el viento, no necesitó más.














Fui a los bosques porque quería vivir a conciencia, quería vivir a fondo y extraer todo el meollo a la vida, dejar a un lado todo lo que no fuese vida, para no descubrir en el momento de la muerte, que no había vivido." (Thoreau)

[ansanga]

Estrasburgo



La pequeña Francia







Nurburgring

En Nurburgring me encontré con un pequeño inconveniente, debido a la nieve, al frío, y a la pista mojada en algunos tramos, a las pocas motos que se acercaron ilusionadas (en realidad sólo estaba yo, hacía más de 4 mil km. que no veía ninguna moto por la carretera ) que pensaban recorrer el mítico trazado no se les permitió entrar y disfrutar de él. De poco valieron mis ruegos, ni mi promesa de que no me interesaba ir rápido, de nada sirvió intentar explicar que sólo quería parar en cada curva a echar unas cuantas fotos, esto último, y por la cara que ponía el comisario, creo que ratificó su decisión de no dejarme correr, una pena.








Museo aeronáutico






Metz










Nancy
















Millau








Colliure







Tumba de Antonio Machado


Todo pasa y todo queda,
pero lo nuestro es pasar,
pasar haciendo caminos,
caminos sobre el mar.

Nunca perseguí la gloria,
ni dejar en la memoria
de los hombres mi canción;
yo amo los mundos sutiles,
ingrávidos y gentiles,
como pompas de jabón.

Me gusta verlos pintarse
de sol y grana, volar
bajo el cielo azul, temblar
súbitamente y quebrarse...

Nunca perseguí la gloria.

Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
caminante, no hay camino,
se hace camino al andar. (Cantares – Antonio Machado)



Y allá en el horizonte, España.




Mi última mañana amaneció en Perpiñán y una triste emoción se hizo presa de mí, esto se acaba decía, es la hora de decir adiós, pero aún no estaba preparado, no podía, no quería, habían sido casi dos meses de peregrinaje y no estaba dispuesto a que se acabará. Pensé en continuar hacia Asturias, darme media vuelta y buscar un nuevo rumbo, otro destino, no importaba cual, cualquier cosa que me permitiera continuar, mantener cuanto tiempo pudiera ese estado de libertad, pero no podía, tenía que acabarse, conforme iba llegando a España las obligaciones poco a poco habían vuelto a hacerse dueñas de mi mente... ley de viaje.
Aunque no me iba a rendir con facilidad, estaba cerca de los Pirineos y nunca los había disfrutado en primavera, y aunque su clima todavía no había llegado a ellos, no importaba, porque no importa la estación del año en que los recorras, los Pirineos, son siempre una buena idea.

Valle de Nuria










Podría decir que aquí se acaba mi viaje, pero no sería verdad, un año después de mi regreso me encuentro que constantemente vuelvo a él, recordando esos gélidos días de invierno y a aquellas gratas sensaciones que experimenté. No creo que logre saber realmente que nos impulsa a partir más allá de nuestra tierra, abandonar la seguridad de lo conocido y, tal cual decía la cita, hurgar en lo desconocido con el dedo de la audacia. Quizá sea el hambre de conocimiento, la búsqueda de ideas nuevas, de nuevos lugares, tal vez escapar de la monotonía o poder abandonar durante un breve espacio la anodina vida, no lo sé, y tal vez no importe saberlo, solo sé, que nunca me encuentro más en casa como cuando estoy fuera de ella. Para todo aquél que nunca haya viajado en soledad, he de decir, que erróneamente a lo que piensa la mayoría, nunca te encuentras sólo, al menos, yo no lo he estado, siempre encuentras a gente que comparte parte de tu camino y de la cual aprendes y te nutres, es curioso verte hablando con extraños de cosas de las que no sueles hablar con amigos o familiares, y en los momentos en los que la soledad te invade, siempre acude a ti aquella persona a la que por el trasiego de la sociedad en la que nos encontramos raramente escuchamos, cuando sale a mi encuentro siempre agradezco su compañía, y siempre sabe mostrarme una nueva visión que desconozco, tal vez sea eso lo que más echo de menos, tal vez sea esa, la razón por la que viajo.






Aunque cronológicamente estemos separados de Ulises por miles de años en el tiempo, todavía moramos a su sombra. Yo me quedo con su grito más humano, el que, cuando abrumado por tanta desdicha, ya solo y perdido en el océano, clama: "¡Aguanta, corazón!"

[Nebari]

Gran viaje; quizás el viaje de tu vida. Pero aún te quedan muchos caminos que descubrir y muchos horizontes que alcanzar.

[buho]

Muchas gracias por compartir ese gran viaje con nosotros, es una pasada. Has tocado muchos de los sitios que espero poder ver en persona algun dia, y a ser posible en moto.

Lo de Nurburgring un putadon, pero bueno asi hay que volver en otra ocasion. No?

Un saludo 

[Vfrlopez]

Cuando emprendas tu viaje a Itaca
pide que el camino sea largo,
lleno de aventuras, lleno de experiencias.
No temas a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al colérico Poseidón,
seres tales jamás hallarás en tu camino.......


fantástica crónica

salu2

[Angel]

...Ten siempre en tu mente a Ítaca.
La llegada allí es tu destino.
Pero no apresures tu viaje en absoluto...

Enhorabuena y gracias.

[Charly-VFR]

No encuentro palabras ni iconos que poner aquí.

Enhorabuena.

[ansanga]

Cuando emprendas tu viaje a Itaca
pide que el camino sea largo,
lleno de aventuras, lleno de experiencias.
No temas a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al colérico Poseidón,
seres tales jamás hallarás en tu camino.......


fantástica crónica

salu2

grandisima respuesta  . Un gran poema.

[peleja]

 Enhorabuena por disfrutar así de la soledad,yo creo que sería incapaz.

[Arri]

Mi admiración, respeto y envidia por un viaje así. 

[gilito]

impresionante viaje, te felicito y te envidio por igual.

[holleros]

Otro viaje y crónica sensacional. Pero que envidia me das. 

[rami_vfr]

Impresionante.

Muchas gracias por compartirlo.

[champa]

Que viaje más extraordinario y que crónica más buena, como he disfrutado leyéndola.

Un saludo

[black_rider]

Que viajecito bueno te has pegado así como quien no quiere la cosa. Felicidades!!! Y que Buenas fotos! Gracias por compartir.

Envidia no, pero que guapo el viaje!


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En otro orden de cosas, y ya que te interesa el tema, a modo anecdótico te cuento que mi hijo pequeño hace teatro clásico en el insti, en la compañía "Selene". En este momento están ensayando "Asinaria", de Plauto; este es romano, pero hace poco ganaron el primer premio nacional para grupos de teatro de institutos con una adapatción de "Helena" de Eurípides. Como es obligatorio gastarse el dinero del premio en una actividad cultural, harán un viaje a Grecia este verano en Julio. Y estos si que me dan a mí envidia!!!


fotos de la final, celebrada en Sagunto:
http://www.seleneteatro.com/obras/helena

[Valen]

Que aggggcoooooo te tengoooo!!!   

v'ssssssssss

[wookie]

No le aplaudais que se fue a traicion y no le pudimos acompañar!!!



Gran viaje Toni.

[Sonic]

Cuando descansan mis pies, también deja de funcionar mi mente.

H.G. Hamann


Como regla general de biología, las especies migratorias son menos 'agresivas' que las sedentarias.

Hay un motivo obvio por que ha de ser así. La migración per se, como el peregrinaje, es el viaje más duro: es el 'nivelador' en el que sobrevive el "fuerte" y los 'rezagados' quedan atrás. Los viajes por tanto, se anticipan a la necesidad de jerarquías y muestras de dominancia. Los 'dictadores' del reino animal son los que viven en un ambiente de plenitud material y sedentarismo. Los anarquistas, como siempre, son los 'caballeros' del camino.

B. Chatwin: Los trazos de la Canción.

No te envidio la oportunidad, los dioses saben que he tenido y consumado muchas. Eso sí, te envidio el tiempo, ya que hace mucho que no me puedo permitir un buen viaje largo a solas; cosa que siempre me ha resultado llena de satisfacciones.

Gracias por compartirlo Toni.