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Viaje a Eslovenia y Croacia 2014 - Crónica completa

Iniciado por Txarly, Noviembre 28, 2014, 07:03:45 PM

Vigus

Dios! Estoy sufriendo por vosotros de lo mal que lo pasáis. :eusa_whistle: Sigo enganchado.

Nebari

Estamos teniendo un ameno y precioso viaje por Eslovenia-Croacia.  :drink5:

ppicazo

Muy buena crónica del viaje, que envidia. A ver como continúa
Enviado desde mi VFR

Txarly

#23
Día 6: Lagos de Plitvicka - Split (287 kms)
https://www.google.es/maps/dir/Plitvice+Lakes+National+Park,+Nacionalni+park+Plitvi%C4%8Dka+jezera,+53231,+Plitvi%C4%8Dka+Jezera,+Croatia/Split,+Croatia/@44.2545857,15.5868817,9z/data=!4m13!4m12!1m5!1m1!1s0x47615e6cfed90f3d:0x51a8ff8379a5e70!2m2!1d15.582012!2d44.865397!1m5!1m1!1s0x13355dfc6bbcf517:0xa1798ff631b49f98!2m2!1d16.4401935!2d43.5081323

De nuevo nos levantamos temprano, da gusto hacerlo cuando es por placer y no por obligación... :D Hoy vamos a bajar hasta la famosa costa croata, que ya no dejaremos hasta salir del país. Nos gustaría haber bajado hasta Dubrovnik pero sería un poco excesivo... y hay que dejar algo para la próxima visita, ¿no? ;) Desayunamos servidos por una pareja mayor, suponemos que los padres del croata que nos atendió anoche. A diferencia de su hijo, ellos no hablan ni papa de inglés, y como mi croata es aún embrionario, nos comunicamos con gestos y sonrisas; cuando hay voluntad por ambas partes todo es más fácil. Después del desayuno pagamos (la factura estaba ya preparada), empaquetamos con eficiencia y enseguida estamos rodando rumbo sur en medio de los fabulosos bosques del parque, disfrutando del sol que, por fin, ha decidido asomarse.

Poco a poco el bosque ralea y los árboles son cada vez más pequeños y escasos. La nacional, con buen asfalto, atraviesa alguna que otra pequeña población entre colinas y terreno abierto, donde rebaños de ovejas pacen tranquilamente. Para cuando llegamos al enlace de la A1 de Gornja Ploca, el paisaje ha cambiado por completo: es llano, abierto, con un suelo calizo que debe ser poco aprovechable porque no se ve ni un solo cultivo en muchos kilómetros, sólo matorrales y árboles raquíticos. Al fondo a lo lejos se ve una cordillera no muy alta pero bastante aserrada que rodea casi todo, y el conjunto ofrece un panorama de belleza un tanto desolada, un poco al estilo de las parameras del norte de Burgos, por poner un ejemplo que conozco, pero más extenso.

Al entrar en una zona de terreno cuesta abajo vemos una amplia zona pelada y, a lo lejos, empieza a vislumbrarse el mar. Sorprende la gran extensión de terreno yermo, no hay ni un solo árbol, ni un solo cultivo, ni una sola casa en muchos kilómetros. El conjunto gasolinera-bar de carretera en el que paramos a tomar un café y estirar las piernas parece completamente fuera de lugar y es el paradigma de la soledad, y me pregunto cuantos kilómetros tendrán que hacer sus empleados para ir diariamente al trabajo.

A la altura de Jasenice ya empezamos a ver lo que será una constante a lo largo de toda la costa: cientos de islas de todos los tamaños y una línea de costa irregular y totalmente laberíntica que te confunde e impide saber si estás viendo el mar, una ensenada o un lago. No es de extrañar que los corsarios locales, los uskoks, fuesen temidos; en buenos conocedores de la costa, podían aparecer y desaparecer a voluntad, escondiendo sus naves en las quebradas.

Poco antes de Sibenik, a la altura de Skradin, vemos lo que tomamos por un lago o embalse y paramos a hacer unas fotos. Consultando el mapa descubrimos con sorpresa que no es un embalse, sino el mar mediterráneo en una de sus quebradas.

Parece un embalse, pero es el mar. Krka-Donji Tok, junto a Sibenik

Finalmente llegamos a Split y el navegador nos guía hasta cerca del hotel, aunque esta vez no es muy preciso. Tanteamos una calle, sin éxito, y probamos en la paralela, donde un pequeño cartel al final de la calle nos permite encontrar el bloque de apartamentos de alquiler. No es muy céntrico, pero se puede ir andando en un tiempo razonable, así que nos vale. Solventamos las formalidades de entrada -hablan un razonable inglés- y, ya en pantalón corto, buscamos uno de los restaurantes que nos han sugerido para comer, que ya va tocando. Después de comer paseamos disfrutando del paisaje hasta el centro de Split.

Costa croata. Enfrente la isla de Brac, a la derecha la de Solta

Split tiene una larga y turbulenta historia, desde sus inicios como colonia griega (siglo IV a.C.), luego bajo dominio romano (el palacio de Diocleciano es una buena muestra) hasta que cayó en manos de los ostrogodos, sólo para ser reconquistada por Roma y permanecer en el imperio bizantino hasta el siglo X, con la creación del reino de Croacia. Después vino una larga sucesión de guerras y paces con las potencias vecinas: Hungría, Venecia, Bizancio, Bosnia y, como no, el imperio otomano. Con el fin de la 1ª GM y la disolución del imperio austrohúngaro pasó a formar parte del reino de Yugoslavia tras una larga serie de disturbios, y tras la 2ª GM, se integró en la república socialista de Yugoslavia. En 1991 Croacia declaró la independencia, y la historia reciente es tristemente conocida por todos. Aunque no sufrieron las barbaridades de Kosovo, tampoco fue un camino de rosas: la guerra de independencia croata duró de 1991 a 1995 y se saldó con 20,000 muertos, la derrota de las fuerzas serbias y la conservación de todo el territorio croata.

En la actualidad del primitivo palacio de Diocleciano quedan indicios, como sus muros exteriores y algunos edificios interiores, lo suficiente para hacerse una idea de la enormidad de la obra, que bien podríamos calificar de faraónica. El resto no son ruinas, sino lo contrario: con el paso del tiempo los habitantes de Split han ido adaptando y reconstruyendo los edificios que componían el conjunto del palacio, de manera que lo que hoy ves es una especie de patchwork arquitectural mezclando estilos y que compone un laberinto de calles, callejas y callejuelas donde perderse, buscando los vestigios del antiguo esplendor diocleciano, como el enlosado romano, pulido por miles de pies durante cientos de años pero perfectamente funcional, o el acueducto que, aún hoy, suministra agua a la ciudad.

Reconstitución del palacio de Diocleciano original

Tras subir trabajosamente a la torre por un pasillo estrecho y de escalones sumamente empinados (y previo pago de una módica entrada al sonriente vejete sentado abajo), la ciudad se despliega a nuestros pies y jugamos a adivinar la estructura del palacio: los muros, la puerta áurea, la puerta argéntea...

Panorámica suroeste de Split desde la torre de la iglesia

Luego de recorrer el palacio y las catacumbas, parcialmente reconvertidas en sala de exposición de arte, paseamos por Split y, de regreso al hotel, nos proveeemos de un poco de fruta y algo para cenar, no es plan de tirar de restaurante a todas horas. Contentos, satisfechos y cansados regresamos a nuestro apartamento para cenar y descansar; mañana empezaremos a bordear la costa croata en dirección noroeste, ya que Split es lo más al sur que vamos a llegar, al menos en este viaje.

Hotel: Adriatic Queen Villa, Spinciceva 33e, Split, 21000, Croacia
Precio : 450 HRK (59,1 €) la hab. doble, sin desayuno.
Puntos + : Edificio nuevo, WiFi, nevera, aire acondicionado. Personal amable y servicial.
Puntos - : Algo alejado del centro, unos 20 min. a pie

cardeiro

Eres mi héroe wey!!!!
Pedazo crónica!!!
AC/DC

ppicazo

Enviado desde mi VFR

jcap

[url=https://ibb.co/ftfchT3][/url]

Txarly

#27
Gracias por los piropos  :icon_cool: sigo contandoos

Día 7: Split - Senj (282 kms)
https://www.google.es/maps/dir/Split,+Croatia/Senj,+Croatia/@44.2470143,15.4099373,9z/data=!4m19!4m18!1m10!1m1!1s0x13355dfc6bbcf517:0xa1798ff631b49f98!2m2!1d16.4401935!2d43.5081323!3m4!1m2!1d15.0193667!2d44.5678531!3s0x47623488008bb3e5:0x3fb4e365f6f6bc9e!1m5!1m1!1s0x47639984a6ae8e53:0xee12096298e326b4!2m2!1d14.9036052!2d44.9893604!3e0

La etapa de hoy es el inicio de la vuelta a casa, pero aún queda mucha costa croata por descubrir. Hemos previsto dormir en Senj por quedar a una distancia que nos permita ir por la carretera de la costa, es decir, cubrir menos distancia en el mismo tiempo, pero con un paisaje a priori más bonito. Veremos. De momento empacamos y dejamos el apartamento de Split, que habíamos pagado al llegar, y buscamos donde desayunar. Paramos en la primera terraza que vemos, en una calle céntrica de Split (con un nombre muy gracioso, Put Firula), nos acomodamos e indicamos al camarero que queremos desayunar. Nos dice que sirven café, pero nada de comer y, ante nuestra evidente decepción, nos sugiere comprar algo de bollería en una panadería "ahí al lado" y consumirla en la terraza, junto con el café que nos servirá él. Nos parece razonable y decidimos que Pilar se quedará en la terraza con toda la parafernalia motera mientras que yo iré a la panadería.

El camarero me acompaña a un extremo de la terraza, me señala la calleja de la izquierda y me dice que entre en el garaje del fondo a la derecha y que mire ahí. Aquello tiene pinta de todo menos de un sitio para una panadería y le hago caso, aunque con serias reticencias, sospecho que me está tomando el pelo. Poco convencido, entro en el garaje y, una vez acostumbrado a la penumbra, veo que al fondo hay una puerta y gente que entra y sale, y al acercarme descubro que es la entrada a un supermercado y que, en efecto, ahí detrás hay una panadería con muy buena pinta. Claramente he pecado de suspicaz. Aquí no hablan inglés, pero tampoco hace falta, escojo unos bollos con muy buena pinta e indico 2 con los dedos, y el precio aparece en la pantalla de la caja registradora, así que pago y me voy contento.

Mientras desayunamos me pego con el navegador para que nos lleve por la carretera de la costa y no por la A1 como parece empeñado en hacer. Al final, fijando waypoints en Sibenik y Zadar consigo que me haga caso, de modo que nos despedimos del simpático camarero y nos ponemos en marcha. El cielo está entre nubes y claros y la temperatura es suave, ideal para la moto. Tras un breve trozo de autopista llegamos a la nacional poco antes de Sibenik y seguimos dirección Zadar. La carretera dibuja la línea de la costa y nos ofrece bonitas vistas de los cientos de islas que se extienden por toda su longitud.

La costa croata es una sucesión de islas que hacen que parezca que estás viendo un lago

En el puerto de Zadar hacemos una breve pausa para desentumecer las piernas, y seguimos por la nacional 8. A la altura de Jasenice está el acceso a la A1, pero nosotros seguimos por la nacional, que nos regala una vista espectacular del golfo entre la isla de Pag y las montañas del parque de Paklenica.

Espectacular paisaje de la costa croata


El croniquero más dicharachero del foro

Empieza a apretar el hambre y si seguimos hasta destino es probable que nos quedemos sin comer, vista la hora, así que paramos en un restaurante de carretera con buena pinta, donde un simpático camarero, además de atendernos, charla con nosotros en buen inglés. Seguimos ruta, a ritmo suave y disfrutando del paisaje, que es realmente especial, es una pena que las fotos no le hagan justicia. Casi sin darnos cuenta llegamos a Senj, una pequeña localidad pesquera situada al pie de una colina donde se sitúa el fuerte de Nehaj, construído por los corsarios Uskoks en el siglo XVI para defenderse de los ataques turcos.

El fuerte de Nehaj

Una vez en Senj, el navegador nos lleva calle arriba y luego a la izquierda. Seguimos un poco pero no veo ningún cartel, de modo que decido dar media vuelta. En plena maniobra, Pilar me dice "Era Villa Beba ¿no?" "Sí, ¿por?" "Estamos enfrente" Efectivamente, el portalón ante el cual estoy dando la vuelta tiene una placa con ese nombre y unos teléfonos. Nos bajamos y miramos, pero no se ve a nadie, así que pasamos al plan B, con el móvil-navegador llamamos y el dueño, Karl, nos responde, gratamente sorprendido de que estemos a la puerta misma. Al poco aparece en un scooter, seguido por una familia de lituanos que iban a ocupar la planta superior de la casa. A nosotros nos asignó la planta inferior, con terracita y una vista preciosa sobre la costa y, para rematarlo, nos sacó una cerveza fresquita que nos supo a gloria.

Vista desde el apartamento. Al frente, la isla de Krk (Dgls)

Una vez en ropa "de civil" salimos a recorrer Senj a pie, sin muchas esperanzas ya que lo habíamos escogido por distancia, no por interés turistico. Luego de recorrer el pueblo y el puerto, donde se aprecian restos de las defensas contra turcos y venecianos y que compone un agradable conjunto, decidimos subir "al castillo ése".

Puerto de Senj

La subida fue, digamos, algo aleatoria, porque no fuimos capaces de encontrar el camino bueno, pero todo se saldó con un rodeo sin más consecuencias. La verdad es que con un destino de semejante tamaño, bien visible, es difícil no llegar :D Una vez abonado el módico precio de la entrada, resultó que éramos los únicos visitantes y el vigilante se explayó con nosotros en buen inglés. Aprendimos la historia de los Uskoks, corsarios croatas que hostigaban con técnicas de guerrilla ("uskoci" significa "los que emboscan") a los turcos en el siglo XVI y que participaron al lado de España en la batalla de Lepanto. Estuvieron pirateando y guerreando con turcos y venecianos ya que, al ser una tierra pobre y apenas cultivable, el mar era la única fuente de supervivencia posible. De hecho, las incursiones uskoks originaron la guerra entre Venecia y el Austria de los Habsburgos en varias ocasiones en los siglos XVI y XVII hasta que ambos firmaron un tratado de paz en Madrid en otoño de 1617 que expulsó a los uskoks de Senj, destruyó sus barcos y fortalezas y expulsó a los supervivientes al interior de Croacia, acabando así con sus actividades piratas.

Vista de Senj y las islas de Krk y Prvic desde lo alto del fuerte de Nehaj

Después de admirar la vista desde lo alto del fuerte, bajamos al pueblo, esta vez por el camino bueno, y repusimos los líquidos perdidos en el ascenso  :drink8: en una terraza cerca del puerto. En un hipermercado cerca del apartamento compramos con que cenar y desayunar y volvimos al apartamento apretando el paso pues unas negras nubes no auguraban nada bueno. En efecto, a poco de llegar se puso a llover, la típica tormenta veraniega corta e intensa que hizo que la puesta de sol fuese espectacular.

El sol escondiéndose en la tormenta

Hotel: Villa Beba - Apartments, Ante Starcevica 18, Strmac / Senj, 53270, Croacia
Precio : 340 HRK (45 €) la hab. doble, sin desayuno.
Puntos + : WiFi, nevera, cocina. Propietario muy agradable y campechano, cerveza de bienvenida.
Puntos - : Algo alejado del centro, unos 10 min. a pie

ManuVFR

Esta siendo una crónica espectacular por dioxxxx..

Gracias por el curre , y envía sana por la peaso de aventura que os habéis pegado.

:bienn: :bienn: :bienn: :bienn: :bienn: :bienn:



¡¡¡ Mientras lleguemos todos ...... Me da igual  ¡¡¡

Txarly

Día 8: Senj - Pula - Porec (231 kms)
https://www.google.es/maps/dir/Senj,+Croatia/Pula,+Croatia/Pore%C4%8D,+Croatia/@45.1145742,13.9744096,10z/data=!3m1!4b1!4m20!4m19!1m5!1m1!1s0x47639984a6ae8e53:0xee12096298e326b4!2m2!1d14.9036052!2d44.9893604!1m5!1m1!1s0x477cd2de09337b6d:0x72324a3a7b4e580d!2m2!1d13.8495788!2d44.8666232!1m5!1m1!1s0x477c979c94879029:0x7a9e5b587feaabd!2m2!1d13.5947399!2d45.2271652!3e0

Hoy vamos a seguir yendo costa arriba hasta la península de Istra, viendo lugares con nombres evocadores: Rijeka, Pula, Porec. Ya por costumbre, nos levantamos temprano, descubriendo que la tormenta de anoche nos ha dejado una mañana despejada y soleada, deliciosa para montar en moto. Empaquetamos y una vez acabado el desayuno, aparece Karl, con quien habíamos acordado la hora de salida. Le pagamos y nos explica dónde dejar las llaves y el mando a distancia del portal desde fuera, una vez cerrado, antes de irse deseándonos buen viaje. Saco la moto fuera del portal y, mientras la cargamos tuvimos un buen susto: la calle esta en una muy leve cuesta abajo y no me pareció necesario dejar una marcha engranada; sin embargo, al manipular las maletas la moto se echó hacia delante y se hubiese caído de no ser por la rápida reacción de Pilar, que la sostuvo y frenó a tiempo. Ouf. Pasado el susto y asegurada la moto, acabamos de cargar la moto y nos ponemos en marcha sin más incidentes.

La isla de Krk (Dgls) al radiante sol matinal

Dejamos atrás Senj y enfilamos la carretera, que serpentea siguiendo la irregular costa y nos ofrece fantásticos paisajes como en ningún otro sitio hemos visto. El asfalto está en buen estado general, no hay mucho tráfico y todo parece sonreírnos: buen tiempo, increíbles paisajes, buena compañía... sólo nos faltan los compañeros de otras rutas y KDDs, ojalá algún día podamos recorrerla juntos.

Paisaje costero croata


Cerca del puente que da acceso a la isla de Krk (Dgls)

Al acercarnos a Rijeka el GPS nos lleva por carreteras secundarias, sospecho que la opción "evitar autopistas" me la está jugando, de manera que paramos a descansar un poco, beber algo y reprogramar el GPS. Al hacerlo descubro que no estamos lejos del mítico "automotodrom" (se encuentra en dirección noreste de Rijeka, pasado Cavle) pero, dada la vuelta turística con que nos ha obsequiado el GPS, decidimos seguir hacia Pula y dejamos atrás Rijeka. Tomamos la 'autocesta' A7 siguiendo la costa, pero cuando gira al norte hacia Eslovenia, la dejamos por la B8 hacia Opatija. La carretera se interna en la península de Istria, entre colinas y bosques, y enseguida llegamos a un peaje a la entrada de un moderno túnel. Luego de cruzarlo, la carretera nos lleva hacia el sudoeste entre suaves colinas boscosas, franqueadas por largos viaductos. Se ven campos cultivados en las cercanías de pequeños pueblos, y al llegar a Pazin, la carretera se convierte en autopista y gira hacia el sur mientras las colinas se van achatando y el paisaje es cada vez más llano, poblado por arbustos y vegetación baja.

Enseguida llegamos a Pula y entre el GPS y los carteles de "centar" llegamos a la orilla del mar. Frente a un pequeño puerto deportivo hay un parque (luego supimos que era el parque Titov) y un buen sitio donde aparcar la moto, de modo que nos bajamos, atamos los cascos y comenzamos a buscar nuestro principal objetivo, el famoso anfiteatro romano. En cuanto comenzamos a caminar siguiendo la orilla descubrimos que por puñetera casualidad hemos aparcado muy cerca, pero que los árboles del parque nos impedían verlo. Grandes risas.

Panorámica del interior del anfiteatro

El anfiteatro de Pula, del siglo I DC, es espectacular por varios motivos: muy bien conservado y en restauración (se aprecia la roca más clara de la restaurada torre norte), ubicado junto al mar (se ve a través de los arcos) y de grandes dimensiones (de los mayores que existen), merece la pena visitarlo. Teneís todos los detalles aquí: http://es.wikipedia.org/wiki/Anfiteatro_de_Pula
Alquilar la audioguía es una buena idea pues te da muchos detalles de arquitectura e historia, aunque a veces no es fácil encontrar los paneles numéricos que indican que oir. La mujer del alquiler de audioguías hablaba español y fue encantadora: nos guardó las cazadoras, nos dio indicaciones del anfiteatro y, a petición nuestra, nos sugirió un restaurante  "no demasiado turístico". El restaurante (Pizzeria Jupiter) esta un poco apartado en una callecita en cuesta (Castropola ulica) y estaba tan vacío que hasta preguntamos si se podía comer. Resultó ser muy agradable, buena comida y bien de precio, muy recomendable.

Luego de comer dimos un paseo para hacer la digestión y volvimos a la moto para poner rumbo a Porec. Esta vez nada de autopista, programo el GPS para que nos lleve por la carretera 21. Bordeamos la bahía viendo el anfiteatro desde fuera y enseguida dejamos Pula atrás, avanzando hacia el norte entre pequeños pueblos y campos cultivados. Hay algo de tráfico, se nota que es zona más turística, pero rodamos tranquilos por las largas rectas, comentando la visita a Pula por el intercom. Pasado Brajkovici la carretera se anima al cruzar la quebrada de un entrante del mar, un especie de fiordo pequeñito, pero luego vuelve a girar hacia el norte y al paisaje llano y las largas rectas. Al llegar a Baderna giramos al oeste por la 302 por un paso elevado y enseguida llegamos a Porec.

Encontrar el hotel fue algo más difícil, pero lo conseguimos tras dar un par de vueltas tontas. Desde la carretera parece un restaurante, pero también alquilan habitaciones y tienen servicio de agencia de viajes, como descubrimos al ir a formalizar la reserva. No tuvieron incoveniente en dejarnos guardar la moto en el interior del recinto, de modo que descargamos y fuimos al sobe a cambiarnos para salir a explorar Porec tras una ducha rápida. El camino no era complicado, todo recto (en el B&B nos habían proporcionado un mapa) pero los primeros 600 mts. son por una carretera sin arcén; luego se civiliza y pasamos junto a un supermercado de una cadena local, Mercator, donde a la vuelta compraríamos algo para cenar.

Una vez en Porec enseguida se llega al casco histórico, con la típica planta de ciudad romana: una avenida central (Decumanus maximus) que aún se llama así (Decumanus ulica) cruzada por una serie de calles perpendiculares (sentido norte-sur). Aún conservan el empedrado romano, imagino que convenientemente mantenido por el ayuntamiento.

Decumanus ulica. Obsérvese el empedrado romano

La joya de Porec es su basílica eufrásica, declarada patrimonio de la humanidad por la UNESCO en 1997, así que a ella nos encaminamos. La primera basílica data del siglo IV y parte de su planta puede verse en lo que hoy son los jardines, con unos bonitos mosaicos de formas geométricas y peces muy bien conservados. La basílica visible hoy se construyó entre los siglos V y VI, añadiendo posteriormente (siglo XVI) una torre campanario y un atrio.

Porec desde la torre de la basílica

Recorres las dependencias de la antigua residencia del obispo, subes a la torre (bonitas vistas de todo Porec) y ves los mosaicos romanos originales y te dices que tampoco es para tanto... hasta que entras en el santuario y ves el baldaquino y los mosaicos del siglo VI que lo adornan. Entonces es cuando te quedas parado y con la boca abierta. Se consideran una obra maestra de la arquitectura bizantina, y representan la iconografía cristiana de la época. Y son sencillamente fantásticos.

Vista general del baldaquino


El mosaico del ábside representa a la Virgen con el Niño rodeada de ángeles y santos


Detalle de uno de los mosaicos

Estuvimos un buen rato fascinados por los mosaicos, admirándolos en silencio y apreciando sus fantásticos detalles, hasta que un acólito empezó a pulular preparando la misa. Un poco a regañadientes salimos para acabar de visitar Porec, que, basílica aparte, es un pueblecito de pescadores y tiene poquito que ver, un par de torres (una redonda y otra cuadrada) reconvertidas en restaurantes, el puerto y un montón de restaurantes de pescado con aspecto escandalosamente turístico, de los que huímos como de la peste. Después de reponer líquidos vamos volviendo de manera un poco errática hacia el B&B, buscando donde comprar algo de cena; al ser sábado la cosa estaba difícil, pero el Mercator que vimos al venir estaba abierto y nos solucionó el problema. En el B&B intentamos negociar el desayuno, pero como queremos salir pronto (mañana es una etapa más larga) y es domingo, nos dicen que pueden hacer venir a los cocineros para atendernos. Nos parece una putada hacerles madrugar sólo para ponernos un café y declinamos la oferta con la esperanza de encontrar alguna cafetería por el camino donde gastarnos las últimas kunas que nos quedan (ya salimos de Croacia) y con esas cenamos y nos acostamos pronto.

Hotel: Bed and Breakfast Arlen, Vukovarska 26 / Porec, 52440, Croacia
Precio : 430 HRK (57 €) la hab. doble, sin desayuno.
Puntos + : WiFi, aire acondicionado, parking moto.
Puntos - : Alejado del centro, unos 30 min. a pie, al principio por una carretera sin arcén.

Txarly

Día 9: Porec - Brescia (408 kms)
https://www.google.es/maps/dir/Pore%C4%8D,+Croatia/Brescia+BS,+Italy/@45.5577115,10.9311101,8z/data=!3m1!4b1!4m14!4m13!1m5!1m1!1s0x477c979c94879029:0x7a9e5b587feaabd!2m2!1d13.5947399!2d45.2271652!1m5!1m1!1s0x4781766ea2b0294d:0x22cd4615476aea04!2m2!1d10.2118019!2d45.5415526!3e0


Nos pegamos un buen madrugón y desayunamos algo, poquita cosa, más que nada por no salir en ayunas, aunque echamos en falta un buen café. Confiamos en encontrar por el camino alguna cafetería abierta más pronto que tarde, y con esa esperanza empaquetamos y nos ponemos en ruta, deshaciendo el camino de ayer hasta el entronque con la A9, dirección Trieste. Sin embargo, a medida que vamos avanzando, conseguir un café empieza a parecernos una quimera... no hay ni una área de servicio!! Da la impresión de que la autopista es de reciente construcción y aún no la han adornado, porque hay áreas de descanso, pero sólo disponen de aseos, contenedores de basura y unos columpios y, la verdad, tirarme por un tobogán me apetece más bien poquito en este instante. Y así, suspirando por un café y con un puñado de kunas aún en la cartera, se nos acaba la autopista y, mientras la rala llanura caliza de Istria va dejando paso a un paisaje de suaves colinas boscosas, la frontera aparece ante nuestros ojos y sin más historias salimos de Croacia.

En la frontera con Eslovenia el paisaje cambia bastante

Una vez en Eslovenia, me preocupa la fockin' vignette; me he dado cuenta que la que llevamos caducaba ayer, y me haría maldita la gracia encontrarme con un control en la auopista y que por 1 día me claven una multa. En fin, sursum corda y a ver que pasa. De momento hay suerte, la ruta 11 es una carretera de doble sentido, algo parcheada, que dibuja con sus curvas las colinas del paisaje. Vemos algún que otro restaurante de carretera pero todos están cerrados, se ve que aún estamos en temporada baja. Pese a eso hay bastante tráfico, e imagino que en Julio y Agosto deben de montarse unos buenos atascos aquí. Aprovechamos el doble carril de una cuesta arriba para adelantar a una caravana de coches tras un camión, y en las afueras de Srgasi vemos una gasolinera abierta y paramos a llenar el depósito, que en Italia será más caro. Intentamos hacernos con unos cafés, pero no hay manera, kawentó.

La bajada nos ofrece una bonita vista panorámica: colinas y más colinas, todas arboladas, vaya diferencia con la pelada costa croata. Más restaurantes, todos cerrados, supongo que el que sea domingo por la mañana temprano tampoco ayuda mucho, y la agradable sorpresa de ver que muchos de los quitamiedos llevan una chapa baja de protección para moteros. Al llegar a Koper cogemos, ahora sí, la autopista, y me pongo algo nervioso por lo de la fockin' vignette; si hay control lo llevamos mal. Seguimos dirección Trieste (mientras repito para mis adentros "quenohayacontrol, quenohayacontrol" como una letanía) y, luego de atravesar un túnel un tanto absurdo (no hay montaña que lo justifique, salvo que sea un paso de animales salvajes) a la altura de Skofije, llegamos a la abandonada frontera italiana sin encuentros desagradables. Ouf. Ahora sólo nos falta un café, pero siamo en Italia, seguro que hay buen café. En efecto, una vez dejada atrás la zona industrial de Trieste vemos un área de descanso con cafetería y allá que vamos. Nos instalamos en la terracita y disfrutamos del delicioso café italiano, y un bollo de propina, "porque yo lo valgo".

Finalmente, un café!!

El resto del camino hasta Brescia, donde hemos previsto dormir, no tiene mucha historia... aburrida autopista, aunque eso no nos impide disfrutar del paisaje, comentando detalles sobre un pueblo pintoresco, un castillo encaramado en lo alto de una roca o un valle especialmente bonito. Dejamos atrás Venecia, Pádova y Verona, y al llegar a Brescia el GPS nos guía fielmente hasta el hotel, contorneando la colina del castillo. Y hablando del hotel, tuvimos la suerte de pillar una oferta especial en booking.com: un 4 estrellas, desayuno incluído, en el centro de Brescia. Aparcamos en el patio interior y, tras las formalidades de entrada, subimos a la habitación a darnos una ducha rápida y quitarnos el disfraz de motero. Desde la ventana se ve el castillo, UAU.

Brescia. El castillo visto desde el hotel

La anécdota es que el chico de recepción, el mismo que nos hizo el check-in, cuando bajamos a pedir un mapa de Brescia, no nos reconoció vestidos "de civil" y nos preguntó si éramos huéspedes del hotel. Aclarado entre risas el malentendido, salimos a pie a buscar donde comer algo ligero y a descubrir la ciudad.

Tras un pequeño paseo llegamos al centro histórico, fácilmente reconocible por sus estrechas y caóticas callejuelas. Junto a la iglesia de S. Faustino hay un pequeño bar con una terracita con mobiliario de plástico donde un grupo de árabes charla animadamente alrededor de unos cafés. En el interior del local, vacío, un abuelete con expresión bonachona limpia vasos detrás de la barra, y en itañol conseguimos pedir un par de panini y algo de beber. Siguiendo sus indicaciones nos sentamos fuera y al poco aparece con dos deliciosos bocadillos calentitos, recién hechos. Después del preceptivo café nos ponemos en marcha y vamos siguiendo los puntos interesantes indicados en el mapa que nos han dado en el hotel. Brescia sigue el patrón de las ciudades italianas del renacimiento: unas cuantas plazas amplias, prácticamente desiertas, profusión de iglesias y algunos detalles interesantes, como el curioso reloj de la piazza della Loggia o el Duomo Vecchio, una iglesia enorme completamente redonda y con bonitas obras en su interior.

Piazza della Loggia de Brescia


Interior del duomo vecchio. Foto tomada con una SJ4000 con una lente de 170º

Después de explorar el centro decidimos subir a ver el castillo, que tiene una pinta estupenda. Aunque no aprieta el calor, la subidita nos hace sudar, sobre todo a mí, pero la visita merece la pena, y la vista sobre la ciudad es muy bonita. Al entrar descubrimos que se trata de un castillo dentro de otro castillo; el interior es típicamente medieval con arreglos renancentistas, y los gruesos muros inclinados del exterior dejan ver a las claras que se diseñó pensando en una defensa contra artillería.

El castillo interior

El recinto amurallado es muy grande y ha sufrido diversas modificaciones, y tardas un rato en recorrerlo entero, sobre todo si te paras a hacer fotos y descubrir sus recovecos. Entre unas cosas y otras, para cuando bajamos de vuelta a la ciudad era hora de cenar, así que nos aposentamos en una pizzería con buena pinta de un barrio popular donde algunos brescianos cenaban y disfrutamos de unos platos típicos italianos. Luego paseo tranquilo, dando rodeos para descubrir puntos interesantes de la ciudad, hasta volver al hotel.

Hotel: Best Western Hotel Master, Via Luigi Apollonio 72 / Brescia, 25128, Italia
Precio : 66.60 € la hab. doble, con desayuno.
Puntos + : 4*, WiFi, aire acondicionado, parking moto, desayuno de lujo, céntrico
Puntos - : ninguno

Txarly

Día 10: Brescia - Castellazo Bormida - Niza (480 kms)
https://www.google.es/maps/dir/Brescia+BS,+Italy/Castellazzo+Bormida+AL,+Italy/Cuneo+CN,+Italy/Nice,+France/@44.6226531,7.6480688,8z/data=!4m31!4m30!1m5!1m1!1s0x4781766ea2b0294d:0x22cd4615476aea04!2m2!1d10.2118019!2d45.5415526!1m10!1m1!1s0x478777756e40efb7:0xdc5ec0ed04034100!2m2!1d8.5767226!2d44.8469873!3m4!1m2!1d8.0878679!2d44.7134283!3s0x4787f580d95ad7e7:0x82870c7a82d21c9d!1m5!1m1!1s0x12cd6938c78138a7:0x135d6bcb1726e647!2m2!1d7.5426711!2d44.3844766!1m5!1m1!1s0x12cdd0106a852d31:0x40819a5fd979a70!2m2!1d7.2619532!2d43.7101728!3e0


Todo lo bueno se acaba, y este viaje que tan bien está saliendo no va a ser menos. Con la mente aún llena de las imágenes que la visita a Brescia nos ha regalado (el conjunto de la ciudad fue una grata sorpresa) bajamos a desayunar. Hay poca gente en el comedor, se ve que los lunes se madruga poco. Damos buena cuenta del suculento desayuno buffet -huevos revueltos, zumo fresco, bollería, cereales, fruta, queso... hay de todo, y muy rico- en parte para compensar las penurias de la víspera, en parte porque hoy toca etapa larga, y poco después está la moto cargada y nos ponemos en marcha. Arrivederci, Brescia !!

Hoy repetimos la primera etapa del viaje, con ligeras variaciones: no sólo vamos al revés, sino que, al salir de Brescia y no de Verona, nos ahorramos unos pocos kilómetros. Además, por hacer algo más que rodar por banales autopistas, hemos previsto hacer una parada en el santuario de la virgen de los moteros, la madonnina dei centauri (virgencita de los centauros), que se encuentra en Castellazzo Bormida, una pequeña localidad al sur de Alessandria y que nos pilla casi de camino.

Con el GPS bien programado, dejamos atrás Cremona -esta vez sin tormenta- y nos adentramos en la llanura del Po, pasando Piacenza y Tortona, y poco antes de Alessandria giramos hacia el sur dirección Castellazzo Bormida. Entrando por la SP181, al noroeste del pueblo, no hay pérdida posible: vas todo recto y, entrando en el pueblo, en el primer cruce, a la izquierda etá la iglesia, con un amplio parking rodeado de una doble hilera de árboles.

Con la Espe frente a la iglesia de la virgen de los moteros

El aparcamiento está totalmente vacío, dejamos la moto a la sombra de los árboles y entramos en la iglesia que, a primera vista, no parece nada especial. Sin embargo, a medida que te vas fijando, los detalles moteros empiezan a verse, como un juego de pistas sutil.

Primera pista: "Iter centaurorum para tutum" (Despeja el camino de los centauros)

PARA LOS CURIOSOS
* Para saber más sobre la Virgen de los centauros (proclamada como tal por Pío XII en 1947), podeís vistar la web de su motoclub: http://www.mcmadonnina.it/lin-spagnolo/storad_s.htm
* "Iter centaurorum para tutum" es un extracto, modificado convenientemente, de un himno mariano medieval del siglo IX: Ave Maris Stella (Salve, Estrella del Mar) Más info en la wikipedia: http://es.wikipedia.org/wiki/Ave_Maris_Stella
Podeís escuchar una interesante versión moderna, con la fantástica voz de la soprano alemana Mojca Erdmann, aquí: https://www.youtube.com/watch?v=v4ewYhRyWUw



Segunda pista: vidriera con motivos moteros

En la capillita del ala derecha de la iglesia se encuentra la sala de exvotos moteros. Se expone una antigua MV Agusta 350 con fotos de competiciones de época. La pared de atrás está cubierta de cascos de moto, antiguos y modernos, todos con impactos de mayor o menor gravedad; por lo que pude entender son recuerdos de moteros que sufrieron un accidente y sobrevivieron, y dejaron el casco en prueba de agradecimiento y devoción a la Madonnina dei centauri. La pared de enfrente de la MV Agusta tiene dos tablones de corcho donde se exponen toda una serie de mensajes con fotos de moteros que fallecieron haciendo lo que amaban: montar en moto. La mayoría son italianos, pero los hay un poco de todas partes. El conjunto es sencillo y sobrio, pero impresiona por lo que representa. Un aura de solemnidad impregna la pequeña sala, de manera que guardas un silencio respetuoso de modo involuntario. Aún hoy, redactando estas líneas, siento esa sensación.

En la sala de exvotos moteros

Nos despedimos de la Madonnina y seguimos ruta: subimos hacia Alessandria y giramos al oeste por la A21 dirección Torino, luego al sudoeste hacia Alba y Cuneo, y al llegar a Borgo San Dalmazzo el paisaje, por fin, cambia. Dejamos atrás la interminable llanura italiana y nos adentramos en las estribaciones de los alpes del sur por la SS20, que se retuerce siguiendo el perfil de un terreno cada vez más abrupto.

Empieza a ser hora de comer, de modo que aprovechando que hay que repostar -llenaremos lo mínimo para llegar a Niza, que en Italia es más caro- intentamos comer algo en el bar de la gasolinera. Lo de poner gasolina no es tan fácil, pues hay que meter el dinero en una maquinita que hay entre los surtidores, especificando que combustible y en que surtidor. Esto lo descubrimos después de estar intentando servirnos gasolina, obviamente sin éxito, hasta que un amable parroquiano nos explicó como funcionaba el curioso invento, mientras la mujer que gestionaba el bar estaba ocupadísima haciendo nada y pasando de nosotros. Tras poner diez eurillos en el depósito, la indolencia de la mujer del bar, unido al aspecto fósil que presentaban los artículos supuestamente comestibles expuestos en la vitrina del bar, hicieron que nos replanteásemos nuestra idea de comer algo allí. Decidimos beber un resfresco y tirar adelante hasta Niza; compraríamos algo para llevar en el chino de cabecera.

Dicho y hecho, allí se quedó la pasota con sus bocadillos mohosos mientras nosotros disfrutábamos de la revirada SS20, cruzábamos el túnel de Tende en sentido opuesto de la ida (y en seco esta vez) seguíamos brevemente por la D6204 en suelo francés, pasábamos de nuevo a Italia por la SR20, nos reíamos -de nuevo- al atravesar la localidad de simpático nombre, Porra (cuando os manden a la Porra ya sabeís a donde ir) y en Ventimiglia girábamos al oeste por la A10, que se convierte en A8 en territorio francés, para entrar en Niza poco después, y llegar a casa.

Y con esto acaba la crónica de este viaje; muchas gracias por tu amable atención y mis disculpas por la entrega a plazos, que supongo será algo frustrante. En mi descargo debo decir que cada entrega de esta crónica lleva su tiempo, hay que generar el itinerario del día, revisar las fotos para escoger las más indicadas (un fuerte aplauso para la avezada fotógrafa  :eusa_clap: :eusa_clap: :eusa_clap:), consultar el mapa y, lo más difícil, estrujarse las meninges para recordar los pequeños detalles, que son los que hacen humano el viaje.

Muchas gracias a tod@s por los elogios; reconforta saber que apreciaís el esfuerzo y cariño que he puesto en escribir esta crónica. Mi única pretensión es hacer revivir el viaje a unos amigos que no pudieron venir pero que me consta les hubiese encantado hacerlo. Espero, de corazón, que la próxima crónica viajera la redactemos juntos.
Un saludo... en V

Arri

Gracias por llevarme un rato contigo de viaje.  Apuntado queda para repetirlo en un futuro cercano.


:drink5:
"Dad al hombre salud y metas a alcanzar
y no se detendrá a pensar si es o no feliz"

George Bernard Shaw

Lopez

Al final, no son los años de vida lo que cuenta, es la vida en tus años.

ansanga

Vaya, no había visto este crónica hasta ahora, espectacular el viaje por lo que leo, me han gustado mucho las fotos, sobre todo las panorámicas. Gracias por el curro.  :bienn:
Crónicas: [URL=[url="http://www.clubvfrspain.es/index.php?topic=31408.0%5DBorracho"]http://www.clubvfrspain.es/index.php?topic=31408.0]Borracho[/url] de olor a jungla virgen[/URL] / Corazón de Ulises / Al calor de la llama


Sergi-k12s

SI DEJAS QUE CAMINE TRAS DE TI, PROMETO ESTARTE AGRADECIDO...


jcap

buena cronica, lastima las fotos, las has puesto pequeñas para mi gusto, si fueran mas granditas podriamos haber disfrutado mas de las preciosas imagenes
[url=https://ibb.co/ftfchT3][/url]

Sonic

Jcap ¿qué dices? El tamaño de las fotos es perfecto y correcto.
[url=http://www.clubvfrspain.es/index.php?topic=26849.0]PIEZAS VTEC[/url] / [url=https://www.dropbox.com/sh/vjla9d67zfyyg73/AAAF4Yza-LVkRnXavRhhlE5ea?dl=0]MANUALES[/url]

jcap

Cita de: Sonic en Enero 15, 2015, 09:05:07 PM
Jcap ¿qué dices? El tamaño de las fotos es perfecto y correcto.
es verdad , he tenido que bajar la resolución de pantalla , es que uso una de 22 pulgadas a 1600x900 :icon_redface:
[url=https://ibb.co/ftfchT3][/url]

Txarly

Gracias a todos por los elogios, celebro que os haya gustado... que con el nivel de crónicas que hay en el foro, lo poneís difícil...
Y gracias al moderador por el chinchetazo, es un honor y una motivación para hacerlo mejor la próxima vez... porque, como no podría ser de otra manera, ya estamos preparando la siguiente para esta primavera/verano  ;)

Nos vemos en la carretera !! V's
PS: Para cualquier duda o consulta, o si vuestra ruta os lleva cerca de Niza, no dudeís en enviarme un privi. Será un placer ayudaros en lo que buenamente pueda.